¡Eeeeeeeeeeeeeeeh! El viernes unos amigos de la oficina y yo nos fuimos a la Arena México a la lucha libre, no sé por qué nunca había ido a ver luchadores, mis papás nunca me llevaron buu, pero tengo que reconocer que es un espectáculo chido chido chidooo, típicamente chilangesco.
Es increíble cómo se atasca de gente la Arena México, el estadio no es muy grande pero da a uno esa sensación envolvente por un ambiente locuaz y populachero. Su piso de madera, los tubos oxidados y la pintura descarapelada dan una chida sensación retro, difícil de explicar.
Hubo 3 peleas, la primera fue de amateurs, unos chaparritos dándose de guamazos pero que no entusiasmaron mucho al público. Estuvo KeMonito, un luchador vestido de chango azul que seguramente no pasa de 1 metro, le dieron tal patada en la jeta que ¡salió volando el pobre! Después fue la pelea de México vs. Resto del Mundo. Peleadores mexicanos (entre ellos Shocker, Dr. Wagner, Bucanero, Volador, Héctor Garza, Dos Caras) contra unos extranjeros, para mala suerte ganaron los fuereños y se llevaron tal cantidad de mentadas de madre que la arena se simbraba.
Al final vino la lucha del Místico contra Perro Aguayo Jr., estuvo poca madre; Místico parece un pinche chango acróbata, es impresionante ver a un guey que se mueva con tantas piruetas y salta desde las esquinas del ring a las primeras filas para aplastar al oponente. Perro Aguayo es un tipo mamadísimo que le metió sus buenas tundas al primero, pero finalmente Místico le aplicó un martinete que lo dejó tirado un buen rato.
En fin, aunque la lucha libre es un performance y a lo mejor las peleas están arregladas; los luchadores se la rifan chido para hacer un gran show y se dan unos madrazos muy reales. Ver las técnicas de pelea, las llaves, vuelos, movimientos y a esos personajazos de máscaras coloridas es impresionante... y un poco perturbante ¡¡¡Definitivamente soy un nuevo fan!!!
¡¡¡Siendo un chango chilango sin haber ido a las luchas me averguenza!!!
Es increíble cómo se atasca de gente la Arena México, el estadio no es muy grande pero da a uno esa sensación envolvente por un ambiente locuaz y populachero. Su piso de madera, los tubos oxidados y la pintura descarapelada dan una chida sensación retro, difícil de explicar.
Hubo 3 peleas, la primera fue de amateurs, unos chaparritos dándose de guamazos pero que no entusiasmaron mucho al público. Estuvo KeMonito, un luchador vestido de chango azul que seguramente no pasa de 1 metro, le dieron tal patada en la jeta que ¡salió volando el pobre! Después fue la pelea de México vs. Resto del Mundo. Peleadores mexicanos (entre ellos Shocker, Dr. Wagner, Bucanero, Volador, Héctor Garza, Dos Caras) contra unos extranjeros, para mala suerte ganaron los fuereños y se llevaron tal cantidad de mentadas de madre que la arena se simbraba.
Al final vino la lucha del Místico contra Perro Aguayo Jr., estuvo poca madre; Místico parece un pinche chango acróbata, es impresionante ver a un guey que se mueva con tantas piruetas y salta desde las esquinas del ring a las primeras filas para aplastar al oponente. Perro Aguayo es un tipo mamadísimo que le metió sus buenas tundas al primero, pero finalmente Místico le aplicó un martinete que lo dejó tirado un buen rato.
En fin, aunque la lucha libre es un performance y a lo mejor las peleas están arregladas; los luchadores se la rifan chido para hacer un gran show y se dan unos madrazos muy reales. Ver las técnicas de pelea, las llaves, vuelos, movimientos y a esos personajazos de máscaras coloridas es impresionante... y un poco perturbante ¡¡¡Definitivamente soy un nuevo fan!!!
¡¡¡Siendo un chango chilango sin haber ido a las luchas me averguenza!!!